También conocidos como congeladores de menos 80 grados, son una categoría especializada de congeladores de laboratorio cuya finalidad es mantener temperaturas de entre –20 °C y –80 °C.

¿Para qué se utilizan los ultracongeladores?
Las condiciones de temperatura ultra baja (ULT, por sus siglas en inglés) pueden ser fundamentales para almacenar muestras y reactivos de manera segura. Los ultracongeladores enfrían normalmente a temperaturas que oscilan entre −50 °C y −80 °C, temperaturas que son significativamente inferiores a las de los congeladores estándar.

Los ultracongeladores constituyen un elemento esencial del equipo en muchos laboratorios, especialmente en aquellos que requieren el almacenamiento seguro a corto o largo plazo de materiales como vacunas o muestras biológicas sensibles a la temperatura, como ADN, ARN, virus, sueros y proteínas.

Los ultracongeladores se ofrecen como unidades verticales, unidades de arcón horizontal o unidades para situar bajo una encimera, en diversos tamaños y con capacidades de hasta 900 l o más. También hay disponibles modelos de sobremesa portátiles pequeños y compactos, normalmente de 25 l, que son una buena opción para uso personal.

La mayoría de los ultracongeladores se fabrican con materiales resistentes y duraderos, como acero inoxidable, aluminio o acero con revestimiento en polvo. También hay disponibles compartimentos o diseños de almacenamiento interno personalizables. Por ejemplo, pueden tener combinaciones de puertas, estantes, cestas y bandejas ajustables e intercambiables. También se pueden adquirir como accesorios sistemas especiales de gradillas, diseñados para almacenar cajas criogénicas, sistemas de almacenamiento de viales o criotubos.

Características disponibles
• Sistemas controlados por microprocesador de bajo consumo energético
• Pantalla táctil digital y fácil de usar
• Puertas con cerradura, apertura con tarjeta o cierre automático para proteger las muestras
• Alarmas de exceso de temperatura
• Control remoto de la temperatura con descarga USB
• Puertas interiores y aislamiento de espuma de alta eficiencia para minimizar las pérdidas de temperatura
• Sistemas de bomba de alta eficiencia para lograr tiempos de enfriamiento más rápidos
• Sistemas de copia de seguridad para fallos mecánicos o de alimentación
• Refrigerantes que cumplen el programa Significant New Alternatives Policy (SNAP) de la Agencia estadounidense de protección medioambiental (EPA), los reglamentos de la Unión Europea sobre gases fluorados u otros requisitos normativos